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viernes, 21 de junio de 2013

Nemo Estados Unidos

Las autoridades prohibieron la circulación de los vehículos en las carreteras pasadas las 17:00

La nieve y el viento golpearon con fuerza el día de ayer al noreste de Estados Unidos con la tormenta Nemo. Los estados de Massachusetts, Rhode Island, Connecticut y Nueva York están en emergencia, debido que las carreteras están cortadas, los aeropuertos cerrados, hay apagones y la actividad prácticamente se encuentra paralizada.

La zona declarada en emergencia cuenta con aproximadamente 23 millones de personas, donde se registra más de medio metro de nieve.

Las autoridades de cada estado ordenaron el cierre de escuelas y oficinas, al tiempo que centenares de quitanieves, equipos de emergencia y toneladas de sal se han esparcido.

Según la web Flight Aware, más de 4 700 vuelos han sido cancelados en aeropuertos tan importantes a nivel internacional como los del área metropolitana de Nueva York y Boston. Mientras que en los estados de Massachusetts y Rhode Island han prohibido que los vehículos privados circulen por las carreteras.

Los osados conductores que salgan a la carretera a partir de las 17:00 se arriesgan a multas de hasta 500 dólares, una prohibición que pretende evitar accidentes y mantener las carreteras disponibles para los equipos de emergencia.

El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, informó que la tormenta no se espera extremadamente grave en ese estado.

Estados como Massachusetts están prácticamente aislados, con rachas de vientos de hasta 120 kilómetros por hora, mientras que los cortes de luz ya afectan a unos 350 mil hogares en toda la región de Nueva Inglaterra.

Boston, una de las ciudades que se espera sea de las más afectadas, está siendo azotada por fuertes vientos y unos 5 centímetros por hora de nieve, según datos del National Weather Service de Estados Unidos.

La autoridades de Marshfield, al sur de Boston, han pedido a los residentes que se preparen para evacuar las zonas costeras más expuestas por posibles inundaciones vinculadas a un aumento de las mareas.

Por el momento, se ha informado de cuatro muertes vinculadas a la tormenta, tres en la provincia de Ontario (Canadá).

Según Weather Channel, en Nueva York una persona falleció atropellada por un conductor que aseguró que perdió el control de su vehículo por la nieve.

Se prevé que los problemas podrían prolongarse todo el fin de semana. (EFE)

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